Representación surrealista del Festival Pollogomez y del pueblo de Villangómez. El artista que realiza la obra destaca por tener un estilo muy colorido, ilustrativo, lleno de alegría y con un punto gamberro, que sin duda marca una diferencia con las demás obras de la Ruta de Murales. En el mural se pueden observar diferentes referencias al pollo, a la fiesta y a la iglesia de San Cosme y San Damián, más en concreto a su espadaña, situada en la parte superior izquierda.